viernes, 8 de mayo de 2015

Publicamos a continuación una carta recibida del equipo 100 Pipers, de la categoría Mayores A, a través de su delegado, dirigida a toda la comunidad de exalumnos que participan en el FECNBA.

Desde la coordinación del torneo, hemos notado las mismas conductas descriptas, desde hace algunas ediciones. Es por eso que nos sumamos al llamado a la reflexión y al pedido de buenos augurios para Lucero Morgante.



 
Carta Abierta a Exalumnos del Torneo: Un llamado a la reflexión (Estimados Organizadores, por favor enviar a los capitanes para su distribución y publicar en la página, muchas gracias).


Queridos compañeros del Colegio. 


Les pedimos humildemente que lean estas líneas. Son un llamado a la reflexión sobre el objetivo y los valores de nuestro querido torneo de ex-alumnos.


El pasado domingo 19 de abril nuestro equipo "100 Pipers" se enfrentó con otro equipo de compañeros del Colegio, con quienes jugamos hace muchos años. En ese partido, nuestro compañero Lucero Morgante recibió un violento golpe a destiempo en su cabeza, ya estando parado el juego, que le produjo una triple fractura en su cara: malar, orbital y nariz. Lucero deberá ser operado el próximo Lunes [27/3] debiendo realizársele 3 cortes en la cara, y colocarle 4 placas de titanio con más de 20 tornillos y un postoperatorio que será doloroso. Sí, es grave.


Lo que más nos llamó la  atención fue la constante queja, insultos, juego brusco y “mala onda” de tan sólo algunos jugadores del equipo contrario. Esto es algo que venimos notando en algunos encuentros entre otros equipos también. Sin ánimo de juzgar a nadie e incluso invitando a Ustedes a que nos llamen la atención si alguno de nosotros no es coherente con este mensaje, invitamos a todos a mejorar la actitud de cada uno de nosotros y de nuestros compañeros. Saludándonos antes y después de cada partido (todos con todos, como en la tele!), bajando los cambios de nuestros mismos compañeros cuando se levantan los humos, tratando de hacer de este hermoso campeonato, que jugamos hace 23 años en nuestro caso, un lindo lugar para hacer deportes con amigos y compañeros del Colegio.


Como ex-alumnos orgullosos de un gran Colegio tenemos la obligación, el orgullo y el placer de priorizar los valores del respeto, tolerancia, amistad, familia ante cualquier afán de ganar un partido o un campeonato. Seguramente la mayoría de nosotros vamos viviendo la vida con sus buenas y malas, y desafíos personales y profesionales, en donde este Campeonato tiene un importante rol como lugar de encuentro, no para descargar pasiones o enojos, sino para acordarse que lo importante está en la salud, las sonrisas, los abrazos, deporte con amigos. No debemos permitirnos nosotros, ni nuestros amigos, lo contrario: la falta de respeto, agresiones o malas intenciones. No sólo por las lesiones, sino también porque el valor y objetivo del torneo es fomentar la camaradería entre ex-alumnos haciendo un deporte sano. Para los más chicos, créannos, cuando pasas los 40, lo que queda en la memoria son los abrazos de gol, la amistad dentro del equipo y con otros equipos, mucho más que los triunfos, derrotas, campeonatos o descensos. Un domingo con lesiones, discusiones, insultos, cosas que nos degradan como individuos, como grupo y como Colegio, es un domingo perdido.


Por favor acompáñennos en un deseo de esperanza y fuerza para Lucero en este duro momento con un email, una firma en el campo, un comentario, o mejor aún con una reflexión: cuando juguemos no vayamos fuerte si podemos evitarlo, demos la mano al rival en el piso para que se levante, no nos insultemos, saludemos al rival. Sólo imaginemos que quien está en frente también caminó por los mismos claustros con los mismos desafíos, alegrías y problemas. Quien está en frente es un compañero del Colegio.


Con afecto.


100 Pipers